sábado, 25 de septiembre de 2021

Reseña de "Treinta días para salvarte el culo", una novela de Raquel Antúnez Cazorla

 

Sinopsis:

Alessander Boneta ha recibido un ultimátum de su editora y tendrá que escribir cien páginas de la novela que ya hace tiempo que tiene comprometida o atenerse a las consecuencias. Como sigue totalmente en blanco, se le ocurre poner un anuncio para encontrar un “ghostwriter”.

Al anuncio responde Valentina Álvarez, que acepta el trabajo, pero porque está casi desesperada, que si no, de qué iba a aguantar al tipo desastroso, sin contar el resto de apelativos mucho menos cariñosos, que se encuentra al llegar a su casa. Pero también tiene buen fondo y, lo que también importa, está un rato bueno.


Comentarios:

Treinta días para salvarte el culo” es la tercera novela que leo y reseño de Raquel Antúnez Cazorla. Antes lo hice con “Totalmente imperfectos”, que me sedujo lo suficiente para repetir meses más tarde con “Redes”. Ahora me he puesto con esta, su última novela.

El título tiene gancho y también es un adelanto de lo que hay dentro, así que nadie se sorprenda de lo explícitos que pueden ser los personajes en sus expresiones, que no se callan ni una.

La narración es en primera persona y ambos protagonistas se van alternando una y otra vez en exponer su punto de vista, lo que cuando están juntos es un toma y daca continuo, que arranca carcajadas más de una vez, sea por las salidas de Valentina o por las de Alessander, que en ocasiones pueden ser un poco brutos y en otras están sembrados.

El contraste entre ambos protagonistas, que es la salsa de la novela, es muy acusado, sobre todo en su carácter, que a Valentina se la ve al principio algo paradita, aunque cuando le pierde el miedo a Alessander, no hay quien la pare… ni quien se atreva a hacerlo.

Por su parte, Alessander es un golfo de cuidado, aunque también es cierto que tiene su encanto, bastante encanto por cierto, de manera que hay muchos momentos en que es el protagonista principal y eclipsa a Valentina.

Si bien, la complicidad que se va formando entre ambos mueve buena parte de la narración, también llega el conflicto que pondrá a prueba sus emociones y, sobre todo, sus expectativas, que se verán truncadas y sin que se les vea arreglo, al menos en un primer momento.

Lo cierto es que me he reído bastante, como pocas veces, con “Treinta días para salvarte el culo”, que es una novela muy divertida, además de entretenida con los líos que se montan entre Valentina y Alessander, que también tendrán, faltaría más, algunos momentos de intimidad bastante intensos. 


Selin

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