Sinopsis:
Catarina, 15 años, y Tania, 10 años, intentan sobrevivir durante el sitio de Leningrado. Es febrero de 1942 y si los bombardeos son continuos a diario, el mayoe peligro es que en las calles hay mucha hambre y si se descuidan, ellas serán otras víctimas más.
Un pequeño pelotón de la policía intentará protegerlas hasta llevarlas a lugar seguro, pero uno tras otro resultan ser poco seguros y el tiempo pasa demasiado deprisa.
Comentarios:
Esta novela me llegó de casualidad y me alegro, pues no creo
que hubiese despertado mi interés con ese título que lleva el pensamiento hacia
la línea editorial Z, bastante popular desde hace un tiempo y a la que no le he
dedicado atención.
Pero fue empezar a leer y descubrí que “Zombies de
Leningrado” era una crónica dura y sin concesiones del sitio al que Leningrado
fue sometida durante la Segunda Guerra Mundial. Alguna sonora exclamación que
me salió al comprender de qué iba la historia, mejor la imaginamos, que no hace
falta transcribirla. Había sustituido mi curiosidad inicial por una atención
completa, tanto a una trama trepidante como al cruel escenario donde se
desarrolla.
Así descubrí que es una historia de la lucha por sobrevivir
en un entorno que se manifiesta hostil en todos los sentidos. No solamente es
la guerra y que la ciudad esté asediada y bombardeada cada día, pues ahí
intervendría el azar como factor más importante. Los peligros más espeluznantes
pueden aparecer al doblar la esquina o encontrártelos en el rellano de la
escalera. Y tal vez puedas evitarlos muchas veces, pero a nada que tengas un
momento de relajación, corres peligro de perder la vida o un pedazo de ti
mismo.
La intensidad de la narración atrapa al lector, que se
integra como uno más en el grupo de supervivientes que protagoniza la historia,
participando de una aventura de futuro incierto y donde ni siquiera se sabe
quiénes llegarán hasta el final y en qué condiciones. Aun que nos salva esa
condición de ser alguien externo y no uno de los personajes, que si esto fuese
un juego de ordenador, más de una vez acabaríamos mal y tendríamos que empezar
la partida de nuevo.
¿Da la sensación de que desdramatizo la historia con algunos
de mis comentarios? Pues sí, pues solamente con imaginar lo que ocurrió en
realidad y que aquí nos transmite Javier Cosnava con muy buen hacer, ya es algo
que revuelve las entrañas. Pero es que lo peor puede llegar si el lector se
plantea en algún momento una pregunta capital: ¿Qué es lo que haría si me
encuentro en una situación como esa? Y aun teniendo en cuenta que cualquier
respuesta que demos ahora será puramente teórica, es fácil quedarse bastante
descolocado.
En mi consideración, “Zombies de Leningrado” es una
excelente novela que trasciende el entorno bélico para centrarse en la pura
lucha por la supervivencia.
Selin
Gracias por la reseña. Te mando un fuerte abrazo desde Asturias ;)
ResponderEliminarHa sido una lectura muy interesante y también instructiva.
EliminarHasta luego.